Kinney hace un trabajo magistral de hacer la vida mundana de los niños al borde de la adolescencia hilarante. Greg es un alma conflictiva: quiere hacer lo correcto, pero la búsqueda constante de estatus y chicas parece socavar todos sus esfuerzos. Sus intentos de demostrar su valía en la carrera de popularidad (estima que actualmente está en el puesto 52 o 53) están constantemente frustrados por padres bien intencionados, un hermano más joven y más viejo, y amigos nerds. Mientras que Greg no es el protagonista más de principios, es su muy ajeno a sus defectos que lo convierte en un héroe tan atractivo.